
Con el fin de garantizar el pleno ejercicio de la ciudadanía y combatir el edadismo, el Gobierno Federal de Brasil reitera la vigencia de la política de la «Media Entrada» para las personas mayores, un derecho fundamental establecido en el Estatuto de la Persona Mayor (Ley Federal Nº 10.741/2003).
La mencionada normativa asegura que quienes tienen sesenta años o más tienen derecho a un descuento de al menos el cincuenta por ciento (50%) del valor del ingreso para participar en cualquier actividad de índole cultural, artística, deportiva y de ocio, facilitando su inserción social y acceso al esparcimiento.
Paralelamente a la difusión de este derecho, la producción cinematográfica brasileña ha puesto el foco en la dignidad de la vejez con la aclamada película «E O Último Azul» (El Último Azul o The Blue Trail). Este largometraje, dirigido por Gabriel Mascaro y coproducido con México, Chile y Países Bajos, generó un significativo debate social al abordar temas cruciales como el edadismo, la libertad individual y el derecho a una vida plena en todas las etapas.
La trama, ambientada en un Brasil distópico, sigue a Tereza, una mujer de 77 años que se niega a ser confinada en una «Colonia» geriátrica y se embarca en un viaje transformador por la Amazonía para cumplir un último deseo. La película, protagonizada por Denise Weinberg y Rodrigo Santoro, ha sido elogiada por su audaz crítica social, su enfoque poético y el esplendor visual de su ambientación, logrando el prestigioso Gran Premio del Jurado en la Berlinale (Festival Internacional de Cine de Berlín).
El éxito de E O Último Azul resuena con el mensaje de que la cultura y los derechos humanos son esenciales en cualquier edad, reafirmando que envejecer es una etapa para seguir soñando y viviendo activamente. Así lo destacó Alexandre Da Silva, Secretario de Derechos Humanos de las Personas Mayores.
Fuente: @alexandrefisio
