Alexandre da Silva, titular de la Secretaría Nacional de los Derechos de las Personas Mayores (SNDPI)

El pasado miércoles 6 de marzo el secretario nacional de los Derechos de las Personas Mayores, Alexandre da Silva, participó de la 23° reunión de la Comisión Intersectorial de Atención a la Salud en los Ciclos de la Vida (CIASCV), del Consejo Nacional de Salud (CNS), para discutir temas relacionados con la salud de las personas mayores en situación de calle y la prestación de servicios para esta población.

En esta oportunidad, Da Silva destacó los desafíos que existen en la articulación para garantizar «la atención multidisciplinaria a las personas mayores en situación de vulnerabilidad» y afirmó que el Ministerio de Derechos Humanos y Ciudadanía (MDHC) busca construir diálogo con entidades federadas para ampliar la atención a a este sector. “Siempre tenemos que pensar en servicios centrados en las demandas de las personas mayores y no en que encajen en los servicios disponibles en un espacio determinado. Este es un gran desafío”, afirmó al respecto.

El secretario también presentó iniciativas del MDHC y del Gobierno Federal para garantizar los derechos primarios de las personas mayores en situación de calle . Alexandre da Silva mencionó el «Programa Vivienda Ciudadana», que tiene como objetivo «ofrecer acceso a una vivienda digna a personas que viven en la calle con el apoyo de equipos multidisciplinarios». Según el titular de la SNDPI, en la actualidad la acción se encuentra en fase de implementación a través de un proyecto piloto en Salvador. La política forma parte del Plan «Calles Visibles», que moviliza a 11 ministerios para promover una atención digna a las personas que viven en las calles.

Asimismo, el secretario mencionó que uno de los puntos sensibles para garantizar la salud y vida digna de esta población es la mala alimentación. “La situación alimentaria es una situación muy importante para las personas mayores en general y, ciertamente, afecta mucho a la población sin hogar. La mala alimentación, considerando desnutrición o sobrepeso, es algo mucho más común entre las personas mayores. Y se trata del acceso que la gente también tiene a la producción y al consumo”, argumentó.

Amanda Fernandes, Defensora Pública del Distrito Federal que trabaja en el Centro de Derechos Humanos, destacó al respecto que cuanto mayor es la acumulación de vulnerabilidades, más difícil es promover una atención adecuada. Mencionó, como ejemplo, que las mujeres mayores que tienen algún tipo de discapacidad o dependencia no cuentan con un albergue preparado para atenderlas en el Distrito Federal. “Las personas más vulnerables son las que tienen menor acceso a los servicios”, alertó.

Rivania Rodrigues, representante de la «Red Nacional de Lesbianas y Bisexuales Negras y Feministas», cuestionó, durante el debate posterior a la mesa inaugural, la falta de discusión sobre políticas de atención y atención a las personas mayores LGBTQIA+. Al respecto, da Silva respondió que hay en proceso, dentro del Gobierno Federal y el MCDH, la posibilidad de realizar un censo a dicho colectivo. Además, señaló que es necesario avanzar en esa dirección, pero que al desafío técnico se suma un desafío cultural. “Así como a una persona le resultó difícil declararse negra o parda, le resultó difícil declararse quilombola, no le será fácil declararse lesbiana, gay o travesti. No es algo tan simple. Y si alguien se identifica, especialmente una persona mayor, a veces al decir esto se verá obligada a volver al armario. Entonces es necesario hacer una buena planificación para no causar traumas ni volver a traumatizar a estas personas ”, concluyó.

Fuente: MCDH-SNDPI