La directora general del Imserso, Mayte Sancho, destacó durante la clausura del curso realizado en conjunto con la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), que uno de los principales desafíos para España es transformar el modelo de cuidados. Acompañada por la consejera de Inclusión Social de Cantabria, Begoña Gómez del Río, y el secretario general de la UIMP, Pablo González Saquero, Sancho subrayó la necesidad de redefinir los cuidados para garantizar los derechos humanos, enfocándose en la autonomía y dignidad de las personas y promoviendo un cambio cultural hacia una atención centrada en las elecciones y deseos de las personas.
En la clausura del curso de verano «De una vida impuesta a una vida elegida. La desinstitucionalización de los apoyos y los cuidados», organizado por el Imserso en colaboración con la UIMP, la directora general del Imserso, Mayte Sancho, estuvo acompañada por la consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad del Gobierno de Cantabria, Begoña Gómez del Río, quien enfatizó la importancia de la colaboración para mejorar los sistemas de cuidados: “Estamos todos en el mismo barco”. Pablo González Saquero, secretario general de la UIMP, también asistió, agradeciendo al Imserso su implicación en la organización del curso.
Durante su intervención, Mayte Sancho subrayó la necesidad urgente de redefinir el sistema de cuidados, destacando que se trata de un desafío que va más allá de la mera logística; es una cuestión de garantizar derechos humanos fundamentales, como la autonomía, la dignidad y el derecho a una vida independiente en la comunidad. «El hecho de necesitar apoyos en la vida diaria no debe implicar la renuncia a una vida digna y elegida», declaró Sancho. Además, recalcó que este cambio debe abordarse de manera global y sistémica, mediante una transformación cultural que deje atrás enfoques asistencialistas y capacitistas, y ponga en el centro los derechos humanos y las decisiones de las personas.
El curso fue inaugurado por Rosa Martínez, secretaria de Estado de Derechos Sociales, quien subrayó la importancia de reforzar los servicios sociales, considerándolos el cuarto pilar del bienestar social, junto con las pensiones, la sanidad y la educación. Martínez destacó que «los cuidados son una cuestión que nos afecta a todos y todas», y que el cambio en el modelo de cuidados debe garantizar que las personas puedan seguir viviendo en sus hogares el mayor tiempo posible, respetando sus decisiones y preferencias. Este modelo de cuidados se enmarca dentro de la «Estrategia Estatal para un nuevo modelo de cuidados en la comunidad: un proceso de desinstitucionalización (2024-2030)», aprobada recientemente por el Consejo de Ministros.
En su intervención, Mayte Sancho también anunció la próxima reforma de la Ley de Dependencia (LAPAD), que incluirá un nuevo catálogo de servicios centrado en este enfoque de cuidados en la comunidad. Además, destacó la importancia de no solo atender a las personas cuidadas, sino también a los cuidadores, en su mayoría mujeres, muchas de ellas migrantes y en condiciones de precariedad. Sancho también abordó la soledad como un problema transversal que afecta a todos los grupos de edad, y que no debe considerarse exclusivo de la vejez.
El curso incluyó varias ponencias y mesas redondas sobre los desafíos del sistema de cuidados, destacando experiencias innovadoras en diferentes regiones de España y en el ámbito internacional. Expertos como Pura Díaz Veiga y Enrique Galván hablaron sobre la importancia de construir redes y soluciones que pongan a las personas en el centro, mientras que otros participantes como Jordi Amblàs y María Teresa Martínez expusieron experiencias de atención integrada y estrategias de cuidados en la comunidad. El curso finalizó con una reflexión de Joseba Zalakain, quien subrayó la necesidad de incrementar la inversión pública en cuidados y garantizar que las familias no carguen solas con esta responsabilidad.
Fuente: Imserso
