El envejecimiento poblacional en Paraguay impulsó la necesidad de crear y adecuar políticas y acciones que garanticen un envejecimiento digno y saludable, con especial énfasis en la promoción de la autonomía personal y la atención a la dependencia. En respuesta a este desafío, el Instituto de Previsión Social (IPS) implementa el Plan “Ciudadano de Oro”, que busca mejorar la calidad de vida de las personas mayores paraguayas a través de la implementación de programas de prestaciones económicas, médicas y sociales.
Como se ha manifestado en otras ediciones de este Boletín, demográficamente la población mayor en Paraguay ha experimentado un crecimiento significativo en las últimas décadas, lo que ha impulsado la necesidad de políticas públicas enfocadas en garantizar envejecimientos dignos, saludables y activos. De acuerdo con datos oficiales, el 10,5% de la población paraguaya tiene 60 años o más y se proyecta que esta cifra seguirá en aumento en los próximos años.
Un informe reciente del Fondo de la Población de las Naciones Unidas (UNFPA, por su siglas en inglés) sobre cifras acerca del estado de la población mundial con foco en el Paraguay, indica que dicho país se encuentra en “una transición demográfica que tiene importantes oportunidades de preparar a la población para los desafíos del envejecimiento”. Sin embargo, este estudio, que se basó en datos del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBP), expresa que en 2050 se espera que 1 de cada 5 personas paraguayas (el 18% de la población) sea mayor. En 2054 “la proporción de personas mayores sobrepasará a la de menores de 15 años”, establece el informe.
En este marco, la representante nacional del UNFPA, Rocío Galiano Marés, fue consultada por medios periodísticos en oportunidad del lanzamiento de este informe y agregó que “para el momento de la transición demográfica el promedio de esperanza de vida pasará de 75 a 78 años (…). Y obviamente, va a ser necesario tener estos debates para establecer el sistema de pensiones, un sistema de salud fortalecido, pero también un sistema de cuidado”, aseguró la referente local. Esta realidad plantea desafíos directos vinculados con el eje temático de este Boletín: la promoción de la autonomía personal y la atención a las situaciones de dependencia.
Plan “Ciudadano de Oro”
El Instituto de Previsión Social (IPS) de Paraguay ha sido un actor clave en la creación de programas y servicios destinados a mejorar la calidad de vida de las personas mayores. En junio de 2024, el IPS lanzó el Plan “Ciudadano de Oro”, con la misión de promover el bienestar de las personas mayores aseguradas del IPS y de aquellas que son titulares del Régimen No Contributivo, a través de servicios sociales complementarios al Seguro de Salud y las Jubilaciones.
Sin embargo, el camino hacia la construcción de un sistema de protección social para las personas mayores en Paraguay tiene un primer hito en 2005, cuando el IPS inició la implementación de acciones destinadas a construir una red de apoyo para esta población. Bajo la coordinación de la Dirección de Planificación y con el respaldo de la Gerencia de Salud del Instituto, se establecieron servicios clave que han sido fundamentales para la atención de las personas mayores.
En 2006, el país vio la habilitación del primer “Servicio de Geriatría en el Hospital Central” del IPS, marcando un nuevo mojón en la atención especializada para este grupo. Poco después, en 2008, se inauguró el Hospital Geriátrico Gerardo Boungermini, el primero y único en su tipo en Paraguay hasta la fecha. Este hospital, junto con el programa de atención domiciliaria MEDICASA, ha sido esencial para ofrecer una atención médica integral y de calidad a las personas mayores, especialmente a aquellas que enfrentan más dificultades para acceder a servicios de salud.
En 2013 se aprobó la «Política Institucional del Adulto Mayor del IPS», actualizada en 2021, la cual establece los lineamientos y estrategias para la implementación de programas y proyectos destinados a mejorar la calidad de vida de las personas mayores. La coordinación técnica de esta política estuvo a cargo de la Dra. Patricia Giménez, actual directora de Planificación del Instituto.
Contemplando estos antecedentes, el nuevo Plan “Ciudadano de Oro” tiene como objetivo general contribuir al bienestar y al desarrollo humano de este grupo poblacional, enfocándose en la educación, la promoción de estilos de vida saludables, la asistencia médica oportuna, y la provisión de prestaciones sociales que mejoren su calidad de vida. Para ello, esta iniciativa integral se plantea abordar necesidades específicas a través de tres programas principales: el Programa de “Prestaciones Económicas”, el Programa de “Prestaciones Médicas” y el Programa de Prestaciones Sociales”.
En lo que respecta a las prestaciones económicas, el Plan se enfoca en asegurar la estabilidad financiera de este grupo, a través de pensiones y jubilaciones. Según el IPS, el 70% de las personas mayores depende de una pensión o jubilación para su sustento, lo que subraya la importancia de este programa en particular. Además, el Instituto implementa convenios de tramitación anticipada de los trámites jubilatorios con diversas instituciones públicas y privadas, facilitando el acceso a estos beneficios sin necesidad de largos y complicados procesos administrativos.
Las prestaciones médicas, por su parte, se centran en garantizar una atención de salud integral para las personas mayores. El componente de “Atención médica” del Plan incluye programas como MEDICASA, Hospitalización larga distancia y Hospitalización corta distancia, que buscan atender de manera efectiva las situaciones de dependencia. Los mismos permiten, según fuentes oficiales, que las personas mayores reciban atención médica en sus hogares o en centros especializados, dependiendo de sus necesidades específicas, lo que reduce la necesidad de institucionalización anticipadas o arbitrarias.
La atención domiciliaria ha sido un área de especial énfasis para el IPS, especialmente a través de MEDICASA, que ofrece atención médica en el hogar para personas mayores con al menos un 50% de discapacidad motora. Este programa, que actualmente cubre la Capital y el Departamento Central, está en proceso de expansión para extender su cobertura a otras regiones del país, incluyendo áreas rurales. Además, según se informa desde el Instituto, se están implementando innovaciones tecnológicas, como la “telemedicina”, para facilitar las interconsultas con especialistas, mejorando así la calidad de la atención ofrecida a las personas desde sus propios hogares.
En cuanto a las prestaciones sociales, el Plan incluye un amplio abanico de servicios y actividades diseñadas para promover la participación activa y el bienestar general de las personas mayores. El programa de “Capacitación para la vida” es uno de los componentes más importantes, según manifiestan desde el IPS, ya que ofrece proyectos como “Preparación para la jubilación”, “Calidad y estilos de vida” y “Cuidadores de Oro”.
El componente de recreación es igualmente significativo, ya que promueve la integración social a través de talleres de teatro, literatura, música, arte, artesanía, plomería, jardinería y computación, entre otros. Estas actividades, además de ofrecer oportunidades de aprendizaje continuo y esparcimiento, fortalecen el sentido de comunidad entre los participantes, aseguran desde el IPS. La actividad física y el turismo, así como los “beneficios sociales” (que incluyen atención preferencial y descuentos en comercios) son otras de las áreas claves que el Plan fomenta.
Además de las actividades recreativas, el IPS también implementa servicios de apoyo emocional y psicológico para las personas mayores y cuidadores/as, esenciales para abordar los desafíos emocionales que a menudo acompañan el envejecimiento y para garantizar instancias formativas y apoyo necesario. El Proyecto “Cuidadores de Oro”, articulado con el Centro de Enseñanza, Documentación y Estudios de la Seguridad Social (CEDDES), es un ejemplo de ello.
El acceso equitativo a los servicios de salud es otra área en la que el IPS ha busca avanzar. En tal sentido, la habilitación del Servicio de Geriatría y la creación del Hospital Geriátrico, demuestra el interés de garantizar una atención especializada para las personas mayores. Estos esfuerzos no solo mejoran la calidad de la atención, aseguran desde el Instituto, sino que también posibilitan que este sector de la sociedad, “independientemente de su ubicación o condición económica”, pueda acceder a servicios de salud de calidad.
Medidas para atender la dependencia y promover la integración social
El envejecimiento de la población lleva consigo un inevitable aumento en las situaciones de dependencia de las personas, entre ellas hay una porción que requieren de asistencia en las actividades de la vida diarias. Según la Encuesta de Calidad de Vida de 2023, aproximadamente el 18% de las personas mayores en Paraguay presentan algún grado de dependencia, lo que refuerza la necesidad de programas y servicios que les brinden apoyo en sus hogares y comunidades
En esta línea, y además de Programa MEDICASA, otro componente esencial que ha destacado el IPS para esta nueva edición del Boletín es la “Rehabilitación y Reinserción Social”, que se enfoca en recuperar la independencia de las personas mayores y reintegrarse en sus comunidades después de un período de enfermedad o dependencia. Los servicios de rehabilitación, que incluyen fisioterapia y terapia ocupacional, son fundamentales para mejorar la movilidad y la funcionalidad de las personas, lo que a su vez fomenta el ejercicio de la autonomía mejorando su calidad de vida.
El Centro Residencial Especializado de Atención y Apoyo para el Adulto Mayor (CREAM) es otro recurso destacado por el Instituto dentro de su sistema de atención a la dependencia. Dicho centro ofrece un entorno seguro y adaptado a las necesidades de las personas mayores que requieren un mayor nivel de asistencia, ya sea de forma temporal o permanente. En el CREAM, se ofrecen servicios de atención médica, rehabilitación y actividades recreativas, todo en un ambiente que promueve la dignidad y el respeto por las personas residentes.
Retos para el futuro
El avance de las tecnologías de la información generó nuevas oportunidades para mejorar la atención y el apoyo a las personas mayores. Por esta razón, el IPS desarrolló una serie de aplicaciones que permiten a la población mayor gestionar diversas solicitudes de manera autónoma, como la actualización de datos personales o la solicitud de beneficios jubilatorios. Estas herramientas no sólo simplifican el acceso a los servicios, sino que también empoderan a las personas mayores al darles un mayor control sobre su vida diaria, afirman desde el organismo.
Sin embargo, a pesar de los avances logrados, el IPS reconoce que aún existen desafíos importantes que deben ser abordados. Uno de los retos más significativos es la falta de un plan específico para la prevención de la institucionalización de las personas mayores. Aunque programas como MEDICASA y “Vida Plena” contribuyeron a reducir la necesidad de internaciones precoces o arbitrarias a personas mayores en instituciones, es necesario seguir desarrollando políticas que promuevan el cuidado en el hogar y la comunidad como la primera opción, manifiestan desde el organismo.
Además, es fundamental fortalecer los servicios de apoyo emocional y psicológico tanto para las personas mayores como para quienes las cuidan. El cuidado de una persona mayor en situación de dependencia puede ser una tarea desafiante y estresante y es esencial proporcionar recursos y apoyo a estas personas para prevenir el agotamiento y asegurar que puedan brindar un cuidado de calidad.
La formación y capacitación continua de profesionales de la salud y cuidadores/as es otro aspecto crucial. El envejecimiento de la población requiere un enfoque especializado en la atención gerontogeriátrica y es necesario que los equipos profesionales estén actualizados con los conocimientos y habilidades necesarios para abordar las complejidades que implica el envejecimiento poblacional y las situaciones de dependencia.
Finalmente, desde el IPS se alienta a continuar promoviendo la investigación y el desarrollo de nuevas estrategias y programas que respondan a las necesidades cambiantes de las personas mayores en Paraguay. La colaboración entre el gobierno, las organizaciones de la sociedad civil y el sector privado será clave para asegurar un envejecimiento digno y saludable en el país y en la región
Nota publicada en el Boletín 32 «La autonomía personal y la atención a las situaciones de dependencia en las personas mayores» del PICSPAM.