Una propuesta socioeducativa de la Asociación Gerontológica Costarricense (AGECO) que interpela a las personas adultas mayores que habitan en las zonas rurales.
Las acciones socioeducativas organizadas por y junto a las personas adultas mayores que viven en ámbitos rurales de Costa Rica constituyen una estrategia para que logren apropiarse de sus derechos y de su propio proceso de envejecimiento, mediante información y alternativas de aprendizaje que contribuyen a la construcción de una vejez digna y activa.
El Programa “Envejeciendo Activamente en mi Comunidad”, explica la Lic. Catalina Calvo Guevara, Coordinadora del área de Proceso de Promoción y Participación Social de AGECO, “busca fortalecer la participación de la población adulta mayor por medio de procesos socioeducativos, de asesoría y formación, bajo una noción no asistencial, autogestionaria, desde el marco del aprendizaje a lo largo de la vida como un derecho de todas las personas”. Y si bien el Programa está dirigido a grupos de personas mayores de cualquier parte del país, reconoce, “ha sido una propuesta eficaz que alcanza a la población de zonas rurales que, en muchos casos, cuentan con menos oportunidades educativas o que, por razones de lejanía, recursos económicos o acceso a servicios, ven más limitadas sus posibilidades de asistir a diversos espacios, pues muchos se encuentran centralizados dentro del país”.
La ejecución se concreta a través de dos grandes acciones. “Por un lado, el fortalecimiento grupal a través de una Red Nacional de Clubes de Personas Mayores, que implica el contacto con líderes y representantes de las agrupaciones según zona geográfica, mediante intercambios entre clubes cercanos para fortalecer la organización e impulsar la autogestión. Actualmente la Red Nacional está dividida en 17 Redes Regionales, una o varias en cada una de las siete provincias del país, la integran 92 grupos, de los cuales más de la mitad son de zonas clasificadas como rurales, y suman un aproximado de 2672 personas mayores”, señala Calvo Guevara. Por otro lado, explica, “los cursos socioeducativos también potencian el Programa. Se trata de espacios que se ofrecen en las comunidades con el fin de sensibilizar a personas adultas mayores sobre el proceso de envejecimiento y la vejez mediante propuestas socioeducativas que promuevan mejores condiciones de vida. Los cursos tienen una duración en promedio de 6 sesiones, bajo una metodología participativa, de educación popular y bajo principios de la gerogogía”.
En 2019, en promedio, se desarrollaron 225 sesiones socioeducativas destinadas a alrededor de 35 grupos de diversas comunidades del país, teniendo un alcance de mil personas mayores participantes, muchas de ellas residentes en sectores rurales como, por ejemplo, en Abangares, Nicoya y Carrillo, en la provincia de Guanacaste, en San Isidro de León Cortés de San José o Labrador de San Mateo en Alajuela. Generalmente, las propuestas surgen y se llevan a cabo ante el interés y la solicitud de las personas mayores, tales como, cursos de desarrollo grupal y personal, fortalecimiento, envejecimiento activo y estilos de vida saludable, estimulación mental, derechos humanos, relaciones humanas, ambiente, entre otros.
A partir de ambas estrategias, explicita la profesional de AGECO, el Programa “Envejeciendo Activamente en mi Comunidad” busca beneficiar a los grupos de personas mayores por medio de acceso a la información, facilitada en sus propios contextos, lo cual es positivo para quienes residen en el ámbito rural, poniendo al servicio la experiencia y especialización de AGECO, con temáticas vigentes y en constante actualización, fomentando el intercambio entre personas y reconociendo el esfuerzo y el aprendizaje de cada una de ellas”.
*Nota publicada en el Boletín 20, «Las personas mayores en el ámbito rural» del Programa Iberoamericano de Cooperación sobre la Situación de las Personas Adultas Mayores.
