El CONAPE continúa con sus jornadas de distribución de ejemplares y charlas sobre la Ley N°352-98, sobre la “Protección a la Persona Envejeciente”, con el objetivo de que las personas mayores dominicanas conozcan y exijan sus derechos | Fuente: CONAPE

El Consejo Nacional de la Persona Envejeciente (CONAPE) de República Dominicana implementa una serie de acciones programáticas, servicios y gestiones directas dirigidas a la población mayor del país, así como también a quienes realizan tareas de apoyo y cuidado a este grupo. Muchas de estas iniciativas están destinadas a la atención de personas mayores con distintos niveles de dependencia, orientadas a promover su autonomía y al ejercicio de sus derechos, a través de abordajes integrales domiciliarios, institucionales y/o comunitarios.

La Ley N°352-98 sobre la Protección a la Persona Envejeciente de la República Dominicana establece en uno de sus principios fundamentales que “deberán tomarse en cuenta los objetivos sociales, el grado de vulnerabilidad de las personas que se quieren proteger, las exigencias del bien común y los derechos y deberes individuales y colectivos, haciendo primar el interés de la persona envejeciente”. De esta forma, dicha normativa establece que las decisiones vitales que deba ejercer una persona mayor sean aceptadas y autorizadas por ella misma, siempre que se encuentre en condiciones de hacerlo.

Teniendo en cuenta este marco legal nacional específico y el eje temático de esta nueva edición del Boletín del Programa Iberoamericano, el Consejo Nacional de la Persona Envejeciente (CONAPE) ha ofrecido una reseña de las acciones y políticas que la República Dominicana viene implementando para promover la autonomía de las personas mayores.

Al respecto, uno de los primeros abordajes que CONAPE realiza consiste en registrar a quienes solicitan atención en el “Sistema Integrado de Atención al Adulto Mayor” (SISDAM), donde se completan las diferentes escalas del “Expediente de Desarrollo Integral y Protección al Adulto Mayor” (EDIAM) y se clasifica según el nivel de dependencia. A partir de allí, una serie de acciones directas son parte de los abordajes que el organismo desarrolla para garantizar una atención adecuada a este grupo poblacional.

De esta manera, entre los programas de apoyo existentes, según informa el Consejo, se encuentra TE-AMA, un programa de “Transferencia Económica al Adulto Mayor” que gestiona un subsidio económico no condicionado mediante cuenta bancaria de RD$600 pesos mensuales. Esta acción está destinada a aquellas personas mayores que no cuentan con algún tipo de ingreso para satisfacer sus necesidades básicas. Es una herramienta de carácter transitorio, “hasta tanto sean incluidas en la pensión solidaria, conforme lo establece la Ley 87-01, creada por el Sistema Dominicano de Seguridad Social”, afirma el CONAPE.

Otro de los programas que destaca el Consejo es el PROVEE, sobre “Protección a la Vejez en Pobreza Extrema”. En este caso, el organismo destina un subsidio económico condicionado de RD$400.00 pesos mensuales a través de la tarjeta “Supérate”, para que las personas destinatarias adquieran insumos alimenticios en comercios establecidos.

“Familia de Cariño” es otra acción programática destacada e implementada por CONAPE, que tiene como objetivo “preservar los derechos, la dignidad, igualdad e inclusión social, identificando personas adultas mayores con necesidades de cuidado y en condición de vulnerabilidad promoviendo así la no institucionalización y dando paso a la permanencia en su núcleo familiar y su comunidad”.

Dicho programa pretende, además, profesionalizar el oficio de cuidado, asegurando que quienes ejercen esta tarea reciban la formación adecuada y tengan condiciones laborales dignas. También se propone garantizar el derecho al cuidado y a ejercer el rol de cuidadores/as, proporcionando oportunidades laborales que contribuyan al desarrollo económico y social de la comunidad.

“Pasante con Sabiduría” es un programa de “reinserción laboral” de personas de 60 años o más que apunta a crear entornos inclusivos y favorables. La iniciativa está concebida para facilitar la participación de estas personas en la vida económica de la sociedad, si así lo desean y lo necesitan, en condiciones satisfactorias y seguras. Al mismo tiempo, promueve la igualdad de trato en la vida laboral, contrastando con conductas discriminatorias que atraviesan al mercado de trabajo.

El Programa AMA, “Acogida del Adulto Mayor en Situaciones de Emergencia”, es una iniciativa que se activa por denuncias recibidas de parte de cualquier ciudadano/a por las vías disponibles, según informa el CONAPE. Es de abordaje inmediato y está orientado al “rescate” de las personas mayores en situaciones de abandono, indigencia y deambulación en calles, hospitales y hogares. Dicha línea tiene, además, el propósito de encontrar a familiares para conocer sobre su situación y abordar revinculaciones donde sea posible, por eso las acciones del programa tienen un carácter de “transitoriedad”, ya que la personas reciben “un techo seguro”, protegiéndolas de situaciones de alto riesgo y garantizando la protección sus derechos fundamentales. Ante las víctimas de violencia o de integridad vulnerada, el Consejo intercede desde otros abordajes específicos.

En lo que respecta a políticas de atención domiciliaria directas, el CONAPE ofrece, por un lado, visitas domiciliarias, una acción que consiste en visitas regulares a los hogares de personas mayores que lo solicitan para evaluar sus condiciones de vida, identificar necesidades específicas y proporcionar orientación personalizada. Las mismas son realizadas por un equipo multidisciplinario y pueden incluir una evaluación socioeconómica, evaluación de salud, legal y bienestar general, así como la coordinación de servicios adicionales según sea necesario. La otra tiene que ver con la implementación de las acciones de cuidado domiciliario en el marco del Programa “Familias de Cariño”, descripto anteriormente.

Participación social y autonomía personal

Dentro de las acciones que CONAPE desarrolla para fortalecer la autonomía personal de la población mayor dominicana en comunidad, se destaca la habilitación de hogares de día a nivel nacional. Estos centros diurnos para mayores son espacios diseñados para ofrecer un ambiente cuidado que funcionan generalmente de lunes a viernes, en un horario extendido y brindan una variedad de actividades que buscan mejorar su calidad de vida. Además de socializar y de participar de diversos talleres, clases y encuentros socioculturales, sus asistentes reciben apoyo en su día a día, que contribuyen con su bienestar emocional y físico. La alimentación es otro aspecto fundamental de dichos centros, según afirma el Consejo, ya que estos dispositivos ofrecen un servicio de alimentación adaptado a las necesidades nutricionales de sus asistentes.

Por otro lado, las Jornadas de Inclusión Social están diseñadas para mejorar la calidad de vida de las personas mayores “en condiciones de pobreza y vulnerabilidad”. Esta línea de acción se fundamenta en un “enfoque humanista y centrado en la persona”, buscando no solo satisfacer las necesidades básicas, sino también promover la dignidad, el respeto y la inclusión social” de este colectivo. Este servicio, que lleva adelante el Consejo con la colaboración de su equipo multidisciplinario y la participación activa de la comunidad, tiene como objetivo “fomentar la inclusión social y proporcionar un apoyo integral a este grupo poblacional”. Dentro de sus principales acciones se incluyen:

  • Planificación y Organización de Jornadas: diseño y ejecución de jornadas de inclusión social que aborden las necesidades específicas de dicho colectivo.
  • Evaluación de Necesidades: identificación y evaluación de las necesidades individuales y comunitarias a través de diagnósticos sociales y económicos, para que las jornadas aborden las áreas más críticas.
  • Atención Integral: provisión de servicios básicos durante las jornadas, tales como atención médica, asesoramiento legal, apoyo psicológico, y la distribución de alimentos y medicamentos esenciales.
  • Capacitación y Educación: implementación de talleres y actividades educativas que promuevan el envejecimiento activo y la autonomía. Incluyen la formación en habilidades básicas, alfabetización digital y gestión financiera.
  • Promoción de la Salud: organización de actividades físicas y recreativas que mejoren la salud física y mental del grupo destinatario, así como charlas y campañas de concienciación sobre la prevención de enfermedades y el mantenimiento de un estilo de vida saludable.
  • Empoderamiento Comunitario: fomento de la participación activa de las personas mayores en la comunidad a través de actividades culturales, recreativas y de voluntariado.
  • Seguimiento y Evaluación: monitoreo continuo de los resultados de las jornadas para evaluar su impacto, adecuando las estrategias y programas según sea necesario para garantizar un apoyo continuo y efectivo.
  • Colaboración Interinstitucional: coordinación con otras instituciones y organizaciones para asegurar una red de apoyo integral, facilitando el acceso a recursos adicionales y programas complementarios.
  • Promoción de Políticas Inclusivas: impulso de políticas públicas que promuevan la inclusión social y la protección de los derechos de las personas mayores en situación de pobreza y vulnerabilidad.

Además de lo compartido, el CONAPE, a través de los centros de atención integral, promueve y ejecuta actividades recreativas, culturales y deportivas, que tienen “un impacto positivo en la integración y participación social de las personas adultas mayores”, según evalúa el organismo.

Este servicio está diseñado para “enriquecer la vida de las personas mayores a través de experiencias culturales significativas”, ya que no sólo fomentan la apreciación del patrimonio cultural, el aprendizaje continuo y la socialización, sino que también contribuyen a un envejecimiento activo y pleno. Para el Consejo, el “enriquecimiento cultural”, el estímulo intelectual y creativo, la mejora de la calidad de vida y el fortalecimiento de la comunidad son parte de los beneficios que se ponen en juego con las actividades culturales. En tanto que las actividades recreativas están orientadas a fomentar la interacción social, la actividad física y el bienestar emocional, a través de fortalecer y crear amistades y redes de apoyo nuevas, que le dan sentido y propósito al encuentro y a la diversión.

Desafíos en el acceso equitativo a servicios de salud

Según el CONAPE, el acceso equitativo a los servicios de salud para las personas mayores dominicanas es un tema “crucial y complejo”. A nivel nacional, este órgano rector identifica varios desafíos y esfuerzos para mejorar esta situación, entre las que destaca dos áreas clave para la mejora: por un lado, la necesidad de visibilizar las desigualdades entre las zonas urbanas y rurales, donde a menudo las personas mayores rurales enfrentan más dificultades para acceder a servicios médicos de calidad; y, por el otro, la importancia de fortalecer los servicios de atención primaria de salud para un atención más adecuada de las necesidades de este grupo. “Esto incluye la creación de redes integradas de servicios de salud y la inversión en equipos multidisciplinarios basados en la comunidad”, expresó en su informe el Consejo.

En cuanto a los esfuerzos, el ente rector resalta los trabajos de articulación con dos organismos internacionales regionales como lo son la Organización Panamericana de la Salud (OPS), mediante estrategias que incluyen iniciativas para eliminar las barreras de acceso para garantizar servicios de salud amplios, independientemente de la ubicación geográfica y situación económica de las personas; y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), a través de acciones que impulsan el “acceso universal e igualitario a la atención de salud”, con un enfoque particular en las necesidades de atención médica equitativa y oportuna de las personas mayores.

Sobre esta cuestión en particular, una de las gestiones directas que realiza CONAPE es la de tramitar el Seguro Médico “SENASA” (Seguro Nacional de Salud) a personas mayores de 65 años. La misma tiene como objetivo “asegurar que la población mayor tenga acceso a una cobertura médica adecuada y de calidad” y el propósito del Consejo es brindar apoyo integral en el proceso de afiliación y de uso de los servicios médicos.

No obstante, a pesar de los avances en el país y en la región, en República Dominicana el acceso a la atención de salud sigue siendo un desafío para las personas mayores, asegura el Consejo. Las discapacidades y la dependencia en materia de apoyos y cuidados, en un marco de longevidad que se asienta progresivamente en la población dominicana, constituyen el escenario actual y próximo de intervención para mejorar los accesos a los sistemas de salud nacionales.

En el marco del desarrollo del Piloto de “Comunidades de Cuidados” en todo el territorio nacional, iniciando en Santo Domingo Este y Azua, el CONAPE se compromete a la implementación del EDIAM para la valoración de la dependencia en la población adulta mayor de dichas poblaciones | Fuente: CONAPE
Servicios que favorecen la autonomía personal

Los servicios psicológicos y de atención temprana que brinda el Departamento de Servicios de Salud del CONAPE son una herramienta clave en la atención de la salud tanto para las personas mayores como para las personas cuidadoras que lo requieran, sobre todo en situaciones de dependencia. Los mismos incluyen apoyo emocional; evaluaciones del estado mental orientados a deterioros neurocognitivos; manejo psicopatológico en intervención de crisis, duelo, depresión y/o ansiedad; y seguimiento, evaluación y apoyo psicológico. Para las personas cuidadoras se ofrecen instancias de psicoeducación e intervención por sobrecarga laboral.

En el marco de las visitas domiciliarias, se realiza una completa evaluación del estado mental y emocional de las personas destinatarias que toman en cuenta factores de depresión, soledad (identificado por el Consejo como uno de los factores de riesgo para el incremento de la dependencia) y también de habilidades cognitivas, mediante pruebas psicométricas y test para la realización de pre-diagnósticos que posibilitan el abordaje, la derivación y la articulación con otras especialidades.

Otro de los servicios “favorecedores” y potenciadores de la autonomía personal en personas mayores son los que brindan oportunidades de educación y formación continua a este colectivo. Algunas de estas acciones disponibles se pueden agrupar en: programas de educación formal; instancias de educación no formal; capacitaciones y talleres; jornadas de intercambio intergeneracional; y acceso a recursos digitales. El Consejo Nacional juega un rol importante en la promoción de este tipo de programas y servicios en el país.

De igual manera, la gestión de viviendas es una acción que fortalece los ejercicios de las autonomías personales de las personas mayores. El mismo consiste en realizar gestiones de reparación o construcción de viviendas a los fines de garantizar el acceso a “viviendas dignas y adecuadas” destinadas a mayores. Este servicio lo realiza el CONAPE en colaboración con el Ministerio de Obras Públicas y el Ministerio de Vivienda y Edificaciones, conforme a lo establecido en la Ley N°352-98.

Por último, otro de los servicios centrados específicamente en la promoción de la autonomía y en la atención a la dependencia que es el destinado a la entrega de dispositivos de apoyo, para “facilitar el acceso y la utilización de equipos esenciales que promuevan la movilidad, comodidad y la seguridad de las personas mayores” que lo requieren. Entre los productos mencionados, el CONAPE gestiona sillas de ruedas; bastones; andadores con y sin ruedas; muletas; sillas de baño; inodoro portátil; entre otros.

Evaluar y monitorear para mejorar

Dentro de los mecanismos de evaluación, por ejemplo, el Consejo realiza un total de 9 auditorías en dispositivos destinados a mayores, incluyendo tanto los centros diurnos como los transitorios y permanentes, ubicados en toda la Región Ozama (que incluye a varios municipios del país). Durante las mismas, evalúan la gestión y el cumplimiento de los programas institucionales, “mediante entrevistas al personal gestor, personal responsable y ejecutores”, junto a la revisión de evidencias en base a las metas establecidas.

En otro de los ejemplos mencionados, el CONAPE destaca los esfuerzos realizados ante la necesidad de reestructuración del mencionado Programa “Pasantes con Sabiduría”, al advertir que requiere de una “colaboración interinstitucional”, “pues no solo busca mitigar la exclusión y el desempleo en este grupo, sino también reconocer sus habilidades para contribuir de manera positiva a la sociedad y proporciona seguridad financiera, mejorando su calidad de vida”.

En el informe compartido por el CONAPE para esta última edición del Boletín, el organismo destaca a la evaluación y al monitoreo como instancias claves para la adecuación y la mejora continua del conjunto de políticas de atención orientadas a su población destinataria, mediante las cuales no sólo se relevan los “impactos” de las ejecuciones, sino también se identifican de algunas “áreas de oportunidades”.

Ilustraciones: Rocío Lana

Nota publicada en el Boletín 32 «Promoción de la autonomía personal y la atención a las situaciones de dependencia en las personas mayores» del PICSPAM.