El Instituto de Previsión Social (IPS) de Paraguay impulsa los Clubes “Vida Plena”, que han sido conformados en distintas localidades de todo el país, con el propósito principal de generar acciones que contemplen la promoción, la prevención y la protección de la salud de las personas mayores, con un enfoque desde el envejecimiento activo.

En 2014 se aprueba, en el seno del Instituto de Previsión Social (IPS) de Paraguay, el Programa de Atención Integral al Adulto Mayor (PAIAM), desde donde emanan los proyectos que luego dan vida a los Clubes “Vida Plena” que el Instituto ha conformado en distintas localidades de todo el país y que son alrededor de cuatro decenas los que funcionan mediante actividades educativas y recreativas destinadas a las personas adultas mayores.

Con el paso de los años, Paraguay ha comenzado a ampliar su población mayor de 60 años que, según las proyecciones de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos (DGEEC), para 2020 este grupo constituye casi el 10% de la población total del país. Esta situación, que se seguirá incrementando conforme avance el tiempo, exige nuevas acciones y políticas destinadas a este sector de la sociedad paraguaya. Es en este sentido que el IPS ha creado esta serie de clubes dentro de sus prestaciones sociosanitarias que están a cargo de la Dirección de Medicina Preventiva y Programas de Salud del Instituto.

Para el IPS, “Vida Plena” se plantea como espacios que apuntan garantizar contención, afectividad, actividades con pares y la orientación de un equipo interdisciplinario de profesionales para mejorar la calidad de vida de las personas mayores que participan de estos dispositivos. El propósito principal de estos clubes es generar acciones que contemplen la promoción, la prevención y la protección de la salud de este grupo, con un enfoque desde el envejecimiento activo. Para ello, ofrecen servicios sociosanitarios que favorecen la participación social de las y los mayores, sus relaciones interpersonales, la ayuda mutua y el intercambio de vivencias desde un estilo de vida saludable.

Reunión de mujeres mayores. Los Clubes “Vida Plena”, ofrecen actividades educativas y recreativas destinadas a las personas adultas mayores | Fuente: IPS

La amenaza que ha significado la expansión global del COVID-19 a atentando no sólo sobre los espacios o dispositivos de este estilo en Paraguay y en el mundo, ya que no sólo aglutinan muchas personas para el desarrollo de sus actividades, sino que también supone reunir al grupo que ha presentado mayor letalidad frente al virus: las personas mayores. En este sentido, el aislamiento preventivo general determinó el cese de las actividades presenciales de los distintos clubes, a partir de lo cual el IPS, a través del equipo de profesionales de dicho Programa, impulsaron nuevas modalidades bajo la opción digital y a distancia, con el objetivo de generar acciones que minimicen el sedentarismo y el deterioro de la salud mental durante el aislamiento social.

El plan de acción se impulsó mediante el acompañamiento y la asistencia de las personas mayores a través de llamadas telefónicas y/o videollamadas, de manera individualizada vía telemedicina preventiva (cuando fuera necesario por afecciones de salud registradas previamente en las fichas clínicas) o grupales mediante espacios virtuales de recreación y educación, adaptados para sostener la sociabilidad y fomentar hábitos saludables que prevengan situaciones de soledad no deseada y de depresión en los diferentes grupos de participantes. Además, complementariamente, se realiza un espacio de consejería a familiares de mayores cuando un caso lo requiera.

El caso de Paraguay, se encuadra dentro de las intervenciones basadas en las nuevas tecnologías que se centran en fortalecer los vínculos sociales y de amistad (en este caso con grupos ya conformados, con trayectoria compartida, que venían participando de las actividades de los clubes de manera presencial) y, al mismo tiempo, en ofrecer posibilidades para aumentar las redes sociales de las personas que puedan colaborar en situaciones donde existan soledades no deseadas, previas o generadas a partir del aislamiento social.

Este tipo de “e-intervenciones” (como se las denomina dentro del campo de la investigación científica sobre la soledad) requieren de mucho rigor técnico para su desarrollo, de manera que no puedan volverse inconsistentes y débiles y, por lo tanto, iatrogénicas, según manifiestan los y las expertos/as sobre la temática. Sin embargo, en este caso, el IPS ha ofrecido esta intervención como un cambio de modalidad transitorio, que posibilita, por un lado, sostener la continuidad de las actividades de los grupos en los diferentes clubes y, por el otro, acompañar a las y los participantes durante este contexto de zozobra para prevenir, a la vez, efectos negativos que pueda causar la situación de aislamiento social.

De esta manera, los principales espacios que se han sostenido en esta nueva modalidad (grupal y virtual) fueron los de actividad física y aquellos sobre manualidades, dentro de las acciones educativas y recreativas que impulsan estos clubes. Ambas actividades instrumentaron videollamada por WhatsApp. En el primer caso se comparten rutinas físicas que, en el marco de pandemia y la cuarentena, ayudan a “aumentar la fuerza, la resistencia y la flexibilidad y también a despejar la mente, a disminuir el stress y a mejorar el descanso”, según Jessica Jara una de las responsables de esta tarea. En tanto que los talleres virtuales de manualidades continuaron realizando sus trabajos con diferentes técnicas desde sus propias casas mediante videos con actividades prácticas para el desarrollo de sus trabajos, según relata la persona a cargo de esta instancia, Idalina Velázquez.

Convocatoria a taller. Las actividades de los clubes cambiaron su modalidad para afrontar este tiempo de pandemia, a través de espacios virtuales de recreación y educación | Fuente: IPS

Por último, en esta misma línea, que ha supuesto un cambio de modalidad (de presencial a distancia/virtual), la Dirección de Medicina Preventiva y Programas de Salud del IPS viene organizando actividades desde 2015 a partir de la “Fiesta de San Juan” (“San Juan ára”, en guaraní), un festejo tradicional que mixtura lo religioso con juegos, pruebas y comidas  populares, donde convocan a los Clubes “Vida Plena” a participar de esta jornada festiva que tiene lugar en las vísperas de los 24 de junio.

Este año, debido al contexto de pandemia, el “sanjuanazo” cambió su modalidad y la Dirección del Instituto impulsó el primer “San Juan Virtual” de personas mayores que se realizó el lunes 22 de junio, a través de videollamadas grupales, donde participaron de bailes y juegos tradicionales más de 200 integrantes de los clubes, como formas de integración social y cultural, de recreación y entretenimiento.

*Nota publicada en el Boletín 21, «La soledad en las personas adultas mayores» del Programa Iberoamericano de Cooperación sobre la Situación de las Personas Adultas Mayores.