Para seguir viviendo autónomamente a medida que envejecemos, es fundamental la creación y adecuación de los entornos accesibles. Esto significa crear condiciones que les aseguren a las personas, independientemente de sus realidades, poder manejarse e interactuar con seguridad y dignidad.

Encuentro organizado por Antzuola Lagunkoia en donde las personas mayores y los comercios del municipio compartieron inquietudes y experiencias| Fuente: Euskadi Lagunkoia

En un contexto de envejecimiento y concentración urbana, las políticas, los servicios y las estructuras relacionadas con el entorno físico y social tienen que ser diseñados y organizados desde un enfoque integrador, que garantice un envejecimiento independiente, autónomo, activo y con calidad de vida. 

Una de las iniciativas destacadas en este marco, escogida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como estudio de caso y considerada un ejemplo de éxito, es Euskadi Lagunkoia (Euskadi Amigable). Se trata de un proyecto promovido por el Gobierno Vasco y puesto en marcha por la Fundación Matia. Su objetivo es incentivar la participación de las personas adultas mayores y de la ciudadanía en general para la mejora de barrios y entornos en los municipios. 

“Euskadi Lagunkoia nace en 2012 como propuesta a nivel territorial y se anima a todos los municipios vascos a sumarse al movimiento de amigabilidad”, relata Elena del Barrio, gerontóloga y coordinadora del proyecto que adhiere a la definición de la OMS: “una ciudad amigable con las personas mayores alienta el envejecimiento activo mediante la optimización de las oportunidades de salud, participación y seguridad, a fin de mejorar la calidad de vida de las personas a medida que envejecen”.

En la actualidad, hay 65 municipios adheridos a la Red Euskadi Lagunkoia. “Al principio costó un poco, ya que el concepto de amigabilidad era desconocido”, comenta del Barrio, “pero estos últimos años se ha extendido la información sobre el proyecto y el alcance se ha multiplicado. Muchos municipios se adhieren desde la concientización ciudadana y son las propias personas mayores quienes reclaman que se ponga en marcha la adecuación de los entornos”.  

Promover la participación y el liderazgo de quienes transitan la vejez es un pilar fundamental de esta propuesta. “Las personas mayores son protagonistas en todo el proceso. En los municipios se trabaja siguiendo la metodología de Investigación Acción Participativa. Se generan Grupos Promotores, compuestos principalmente de personas mayores que realizan el diagnóstico, elaboran un plan y ponen en marcha las acciones”, asegura Elena. En este sentido, el protagonismo se efectiviza en cada una de las etapas en virtud de movimientos concretos de participación ciudadana.

Elena del Barrio, Coordinadora del Proyecto | Fuente: Instituto Matia.

«El protagonismo de las personas mayores se realiza en todas y cada una de las fases promoviendo un movimiento de participación ciudadana en la generación de entornos de vida facilitadores para las personas que envejecen”.  

Elena del barrio

La accesibilidad es una necesidad diaria. Por ello, la reconfiguración de los espacios significa una gran transformación que supone trabajar tanto en el entorno físico como en el entorno social. Así, las personas mayores que forman redes y vínculos, logran fortalecer su liderazgo comunitario. “Los grupos se están convirtiendo en agentes claves de sus municipios, ya que son grandes conocedores de todos los recursos y servicios y, al mismo tiempo, se configuran como interlocutores con el Ayuntamiento para la puesta en marcha de acciones y mejoras”, resalta la coordinadora, orgullosa del proyecto y de sus protagonistas.

Acciones del proyecto:

  • Plan de accesibilidad a la vivienda (Beasain Lagunkoia): el objetivo general de esta práctica finalizada en 2018 consistió en mejorar la amigabilidad y accesibilidad de las viviendas de las personas mayores en Beasain y, con ello, su calidad de vida. 
  • Farmacia amigable: refiere a una serie de compromisos/criterios que una farmacia debe cumplir para aspirar a ser más amigable, comunitaria, social e implicada, mayoritariamente con las personas mayores, pero en general con toda la población.
  • Paseos saludables: se realiza una observación activa del estado de los itinerarios para arreglar aquellos aspectos que así lo necesiten o incorporar mobiliario o elementos necesarios para incrementar la amigabilidad de los mismos. Posteriormente, esta información es transmitida al ayuntamiento para que puedan planificar las acciones pertinentes. 

Guías del proyecto:

  • Guía para una vivienda amigable con las demencias: dirigida a las personas mayores o en proceso de envejecimiento que viven con demencia, a sus cuidadores y entorno sociofamiliar.
  • Guía para una vivienda amigable: brinda información sencilla y útil para que cada familia valore las necesidades que puede tener en su hogar en un momento dado ante posibles situaciones derivadas del envejecimiento. 
  • Guía de amigabilidad para establecimientos, comercio y restauración: ofrece pautas paraque los establecimientos sean más amigables para sus clientes, adecuándolos a las necesidades de las personas mayores. 

*Nota publicada en el Boletín 19, «Entornos accesibles y nuevos hogares para personas adultas mayores» del Programa Iberoamericano de Cooperación sobre la Situación de las Personas Adultas Mayores.